Adriana Molano Arenas
Nació en Medellín, estudió Antropología y se especializó en Políticas Culturales y Gestión de Artes. Tiene experiencia en el desarrollo e implementación de políticas públicas participativas en temas culturales. Reconocida como una de las mayores expertas en patrimonio cultural inmaterial en la región.
Ha liderado proyectos orientados al fortalecimiento del tejido social desde una perspectiva patrimonial en el contexto del desarrollo sostenible con comunidades afrodescendientes, indígenas y campesinas.
A nivel internacional, para la Unesco, ha desarrollado servicios de consultoría y ha sido facilitadora en la estrategia global de creación de capacidades para la implementación de la Convención para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial de 2003.
Entre 2008 y 2015, fue coordinadora del Grupo de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Dirección de Patrimonio y Memoria del Ministerio de Cultura, donde ejecutó una política pública de patrimonio vivo. En el Ministerio de Cultura también coordinó el Grupo fue Literatura entre 2006 y 2008.
Entre 2015 y 2016, fue directora de la Fundación Tridha y del 2017 al 2020, se desempeñó como directora general del Centro Regional para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial de América Latina, CRESPIAL, espacio multilateral con participación de 18 países, auspiciado por la Unesco. Reconocido como un centro de referencia en patrimonio vivo, es una plataforma de cooperación cultural e integración regional, con alta incidencia en la formulación y aplicación de políticas culturales de impacto en el desarrollo social y económico, desde y en el contexto de la realidad Latinoamericana, promoviendo gobernanza cultural y contribuyendo al bienestar, dignidad y creatividad de sus poblaciones
Desde estos espacios, ha buscado el posicionamiento del papel de la cultura en la sostenibilidad ambiental, como factor de resiliencia en situaciones de riesgo (desastres naturales y conflicto armado) como bisagra para una economía sustentable y un turismo responsable, y como factor de cohesión social en temas como educación, memoria, seguridad y soberanía alimentaria, equidad de género, entre otros.