​​Banco de Experiencias Significativas en Cultura - BESC​

Una experiencia significativa es un conjunto de acciones que responde de manera innovadora y satisfactoria a una problemática concreta, por lo cual puede convertirse en ejemplo o referente para otras entidades u organizaciones en contextos similares o diferentes. Para ser considerada como tal, dicha experiencia debe cumplir una serie de requisitos o criterios previamente determinados, tales como innovación, efectividad o impacto, sostenibilidad, participación y pertinencia.​

En la medida en que generan conocimiento y permiten aprender de los demás, las experiencias significativas constituyen un capital intelectual muy importante para las organizaciones, las instituciones y la comunidad en general. Una forma de potenciar su aprovechamiento son los Bancos de Experiencias Significativas, los cuales permiten identificar, reconocer, visibilizar y valorar estas prácticas, así como transferir el conocimiento que a partir de ellas se ha capitalizado.

En todas las regiones del país existen numerosas experiencias culturales, tanto en el ámbito público como en el privado, protagonizadas por artistas, gestores culturales, instituciones, colectivos y ciudadanos(as), que demuestran que la cultura es capaz de lograr transformaciones fundamentales que inciden positivamente en la calidad de vida de las personas y las comunidades. Por múltiples razones, la mayoría de estas experiencias “ejemplarizantes” no trascienden el ámbito local, con lo cual se pierde la posibilidad de aprovechar el capital intelectual que representan y el potencial que tienen para multiplicar sus efectos positivos en otros contextos.​

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Teniendo en cuenta lo anterior y considerando que un Banco de Experiencias Significativas es una valiosa herramienta de gestión del conocimiento, en el 2014 la Dirección de Fomento Regional, junto con el Programa Nacional de Concertación, ha puesto en marcha un Banco de Experiencias Significativas en Cultura encaminado a: 

La líneas temáticas del Banco de Experiencia Significativas en Cultura, en su fase piloto, son: diversidad cultural, participación ciudadana, fortalecimiento institucional, y patrimonio y memoria. En esta primera etapa, el proyecto integra cuatro componentes: ​

• Selección y evaluación: En alianza con la Universidad Pedagógica Nacional de Colombia, institución educativa que desde hace varios años adelanta la supervisión de los proyectos apoyados por el Programa Nacional de Concertación, se realizó la selección de experiencias culturales destacadas en diferentes regiones del país. Para este fin, se diseñó un formato de evaluación que incluyó cinco criterios (innovación, participación, impacto, sostenibilidad y pertinencia) y veinte indicadores debidamente ponderados. La calificación de dichos indicadores y la antigüedad de las experiencias permitió la preselección de 90 de estas y la selección de 45, teniendo como universo los 1.600 proyectos presentados al Programa Nacional de Concertación durante el 2014.

• Visibilización y difusión: Consiste básicamente en desarrollar, en asocio con el Centro Ático de la Pontificia Universidad Javeriana, un portal web que permita registrar, documentar, almacenar y organizar la información de las experiencias significativas seleccionadas, para ponerla a disposición del público en general. Esta herramienta web, cuyo lanzamiento se realizará entre octubre y noviembre del presente año, propiciará el intercambio de conocimientos generados por el Banco de Experiencias y facilitará la dinamización del sector cultural.

• Capacitación y gestión del conocimiento: Las 45 experiencias seleccionadas en la fase piloto del Banco han participado en un taller bajo la técnica de trabajo “Aprender de la Experiencia Práctica” (APL), creada por el Laboratorio Iberoamericano de Investigación e Innovación en Cultura y Desarrollo de la Cátedra UNESCO de la Universidad de Girona (España). Esta metodología es una forma de gestión del conocimiento que busca poner en valor los aportes de diferentes experiencias significativas en cultura. Se entiende como “puesta en valor” un conjunto de procesos por los cuales la práctica y la experiencia se reconocen a sí mismas como un aporte de conocimiento capaz de generar capacidades en un contexto determinado. Entre los meses de junio y julio del 2014, bajo la dirección del profesor Alfons Martinell —prestigioso académico en el ámbito de la gestión cultural, vinculado a la Universidad de Girona—, se desarrollaron tres talleres, cada uno de los cuales congregó a 15 líderes de las experiencias seleccionadas, para un total de 45 gestores participantes.

• Circulación: Este componente, apoyado por la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI), tiene como propósito facilitar el intercambio de conocimientos entre los líderes de la experiencia y el sector cultural, presentando dichas experiencias en contextos diferentes al de su origen o en encuentros que facilitan diálogos. En el presente año, diez experiencias seleccionadas circularán por diferentes ciudades del país, en el marco de la difusión de la convocatoria del Programa Nacional de Concertación, y las restantes se congregarán en encuentros regionales o nacionales auspiciados por el Banco.

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