El reconocimiento de la multiculturalidad y de la plurietnicidad por
parte de la Constitución Política de 1991, inició un prospero camino para que
Colombia se reconociera como país con una riqueza cultural fundada en la
diferencia y la autonomía de sus diversos grupos poblacionales.
Estos principios le han permitido al país avanzar en el conocimiento de
su historia, en el reconocimiento de las tradiciones culturales indígenas , en
el entendimiento de las luchas por la autonomía de las comunidades afro
-descendientes y raizales, y en el descubrimiento de las tradiciones del pueblo
gitano.
La socialización de la historia particular de las diversas poblaciones
colombianas es una de las estrategias más importantes para la desactivación de
la discriminación racial, puesto que permite visibilizar el papel de estas
comunidades en el desarrollo de la nación y logra así evidenciar las
diferencias más allá de la coyuntura, comprendiendo las fuerzas históricas que
han intervenido en la generación de los discursos fundados en la discriminación
racial.
Historia
El Día
internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial se conmemora desde
el 21 de marzo de 1966 y tiene como evento fundador el asesinato de 69 personas
en Sudáfrica por parte de la policía del régimen del Apartheid, cuando
realizaban una manifestación pacífica en 1960 para exigir la igualdad de derechos de la población blanca y
la población negra.
La existencia
del Apartheid en Sudáfrica evidenció una situación de segregación racial que
coincidía con otro evento histórico que se estaba dando en los Estados
Unidos: la lucha por los derechos civiles
de la población afroamericana.
Fue durante la
década de 1960 que el mundo presenció el auge de importantes líderes afro-
descendientes cómo Nelson Mandela y
Martin Luther King, los cuales se se
constituyeron en íconos de las luchas por la eliminación de la discriminación
racial y lograron ubicar en la agenda
política progresista de algunos países del mundo el tema de la igualdad entre
la población blanca y las otras razas que habitan el mundo.
Herramientas de protección
A través de la
Resolución 2142 de 1966, la Asamblea General de las Naciones Unidas
estableció los derroteros universales para la eliminación de todas las formas
de discriminación racial. El contexto político internacional en que se dio esta
resolución estaba marcado por eventos históricos tan relevantes como el inicio
del movimiento ati-apartheid en Sudáfrica, liderado por Nelson Mandela y la lucha por los Derechos Civiles en
Estados Unidos, que tuvo efectos tan lamentables como el asesinato de líderes
de características tan diversas como Martin Luther King y Malcom X, pero que se
constituyó en uno de los movimientos sociales más reconocidos de la segunda
mitad del siglo XX.
Aunque esta resolución se produjo con el objetivo de presionar a los
gobiernos claramente segregacionistas como el de Sudafrica para que desmontaran
sus regímenes, sólo fue hasta la década de 1990 que este sistema dejó de existir.
Más de veinte años después del desmonte de este evidente sistema de segregación
racial fundamentado en leyes injustas,
aún hoy existen gobiernos y legislaciones que segregan a las poblaciones
por su raza, lo que muestra que no siempre la existencia de esquemas jurídicos
garantistas con las llamadas minorías raciales, son suficientes para eliminar
un problema tan socialmente arraigado como la discriminación racial.
En el caso de Colombia, en
Congreso de la República proclamó recientemente una ley que castiga a las
personas que discriminen por razones de raza, etnia, religión, nacionalidad,
ideología política o filosófica, sexo u orientación sexual . Esta ley es el
resultado de un camino recorrido por varias organizaciones sociales y políticas
del país, las cuales promueven los
derechos de las minorías y buscaron durante décadas la penalización del racismo
y otras formas de discriminación en un país multiétnico y pluricultural como
Colombia.
Estadísticas relacionadas
Según el DANE “en Colombia
residen 1.392.623 indígenas que corresponden al 3,43% de la población del país; los afrocolombianos son 4.311.757 personas, el 10,62% del total y el pueblo Rom o gitano está conformado
por 4.858 personas que representan el 0,01% de la población total del país (
DANE, 2007: 37)
Estas estadísticas muestran que Colombia es un país que tiene de una
gran diversidad étnica y cultural. Sin embargo, estos datos muestran también
que en algunos aspectos sociales relacionados con la igualdad de oportunidades
y la afectación por parte del conflicto armado, los indígenas y los afro- descendientes
no están en igualdad de condiciones frente a las poblaciones que no se
identifican con ningún grupo étnico en particular.
El documento “Colombia una nación multicultural” publicado por El
Departamento Administrativo Nacional de Estadística DANE en el año 2007, hace
un análisis de los datos poblacionales que fueron recogidos durante el CENSO
nacional llevado a cabo en 2005, mostrando que la movilidad de los grupos
poblacionales (cambio de residencia) ha estado marcada por situaciones ligadas
a la falta de oportunidades y a la violencia política asociada al conflicto
armado interno.
Según este estudio “La dificultad para conseguir trabajo fue aducida
como la causa del cambio de residencia
por el 20,05% de la población indígena, el 17,98 % de la población
afrocolombiana y el 12,23% de la población Rom” En esta misma línea “Los
pueblos indígenas y afrocolombianos son los más
afectados por el desplazamiento ocasionado por la violencia, siendo la
amenaza para su vida el motivo de cambio
de residencia para el 12,27% de los indígenas, el 6,9% de los
afrocolombianos, el 1,93% de la
población Rom.
En cuanto a las oportunidades de estudio ligadas a la movilidad “La
falta de oportunidades para estudiar ocasionó que el 10,17 % de la población indígena, el 5,9% de
los afrocolombianos y el 2,81% de la población Rom cambiara su lugar de
residencia en los últimos 5 años” ( DANE, 2007: 47-48)