La historia nos ha permitido reflexionar su significado. Ha encarnado la lucha por la libertad y el poder del pueblo, pero qué representa en la actualidad.
La espada de Bolívar ha inspirado a varias generaciones en el país, por ser un símbolo de libertad en la lucha de independencia contra el imperio español. Su hoja ha atravesado diferentes momentos históricos en Colombia.
Uno de esos fue el 17 de enero de 1974, cuando cuatro hombres irrumpieron la Quinta de Bolívar y sustrajeron la espada. Días antes en los periódicos se podían leer mensajes como “¿parásitos, gusanos? Espere M -19”, resulta que esta fue una campaña de expectativa que, luego de aquel suceso, les daría respuestas a los ciudadanos.
Se trataba del Movimiento 19 de abril (que nació después de las controversiales elecciones presidenciales de 1970). El M- 19 fue una guerrilla de origen político y urbano, integrada por intelectuales que realizaban inicialmente acciones poco convencionales, simbólicas como la sustracción de la espada.
“Bolívar, tu espada vuelve a la lucha... la lucha de Bolívar continúa, Bolívar no ha muerto. Su espada rompe las telarañas del museo y se lanza a los combates del presente. Pasa a nuestras manos. A las manos del pueblo en armas. Y apunta ahora contra los explotadores del pueblo”, se leía en el boletín número dos del M-19, en febrero de 1974.
Vera Grave, integrante del movimiento, dijo en la Revista debate de 2010 que “con esta acción que muy pocos entendieron, irrumpimos en la vida pública, rompiendo esquemas: porque Bolívar era para muchos un personaje no ubicable dentro de las teorías revolucionarias. A partir de ese momento… su símbolo de lucha adquirió su valor real”.
Precisamente en ‘La palabra y la espada: lucha armada y discursos de poder en Colombia’ de Roland Anrup, se presenta un análisis de estas acciones. “Como en este caso la lucha por el poder era armada, lo primero que debía rescatarse era justamente el arma del Libertador: su espada, con todo lo que ella representa de pasión, de lucha, tradición histórica y potencia profética”.
En 1990, Antonio Navarro Wolf, líder del Movimiento 19 de abril y uno de los presidentes de la Asamblea Nacional Constituyente, le dijo al profesor Roland Anrup que “era natural y necesario regresar la espada como un símbolo de reconciliación nacional”.
En 1991, diecisiete años después de ser sustraída, la espada volvió a Colombia, a la Quinta de Bolívar, luego de estar escondida en Panamá y en Cuba.
Como vemos, su punta filosa como la de un lápiz, ha escrito parte de la historia de Colombia y aunque es un arma, su simbolismo nos invita a cuestionarnos acerca de la resignificación que podría tener en relación con la construcción de una cultura de paz.
Por eso, el Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes, el Museo Nacional y el Museo Quinta de Bolívar presentan unos espacios de reflexión del 17 al 22 de enero, abiertos al público.
Programación
17 de enero
9:45 a.m. a 10:45 a.m.
Diálogo entre la senadora María José Pizarro, Vera Grabe (jefe negociadora del Gobierno Colombiano con el ELN y exmilitante del M-19) y Otty Patiño (Alto Comisionado para la Paz) para recordar la recuperación de la espada de Bolívar y el contexto que permitió el nacimiento del Movimiento 19 de Abril.
11:00 a.m.
Se ofrecerá una visita por la muestra expositiva en el Museo Nacional de Colombia, a cargo de Fabio Mariño, asesor de la Universidad Militar Nueva Granada y exmilitante del M-19; y el museólogo Edmon Castel.
3:00 p.m.
En la Casa Museo Quinta de Bolívar, se presentará la conversación Memorias de la espada, que contará con la participación de Patricia Lara y Francisco Flórez, director del Archivo General de la Nación. Cupo limitado.
18 de enero
10:15 a.m.
En el Museo Nacional de Colombia se ofrecerá a los públicos la conversación ‘Un acuerdo por la democracia: Hacia una Asamblea Nacional Constituyente’, con la participación de Arjaid Artunduaga y Fabio Mariño.
12:00 m.
Presentación de la cantante y guitarrista Beatriz Castaño.
17 al 22 de enero
Muestra Epílogo
Museo Nacional de Colombia
Con la muestra expositiva se busca resaltar los esfuerzos del Gobierno Colombiano para impulsar la dejación de armas en 1990 del M-19, lo que abonó el camino hacia la Asamblea Nacional Constituyente en 1991.
Tzendrá lugar en la Sala 11 del museo, estará conformada por documentos para la unificación de una propuesta de paz, entre el Gobierno Nacional y el M-19; así como libros, cartas y fotografías, testimonios que acompañan los ejercicios de memoria de nuestra nación para una mejor comprensión sobre los desafíos que hemos enfrentado para superar la violencia.