Por: Damaris Paola Rozo López
El día internacional de las Lenguas Nativas 2018 fue conmemorado por el Instituto Caro y Cuervo con el apoyo del Ministerio de Cultura en los días 21, 22 y 23 de febrero. Esta conmemoración tuvo como propósito central generar espacios de reconocimiento a la diversidad lingüística y cultural de Colombia. Los espacios que se abrieron fueron clasificados en actividades académicas y culturales con la participación de investigadores y académicos que han centrado gran parte de su vida y estudios al análisis de las lenguas indígenas.
La apertura del evento el 21 de febrero se realizó en la Hacienda Yerbabuena localizada en Chía, Cundinamarca. La Directora del Instituto Caro y Cuervo Carmen Millán mencionó que la apertura del evento era importante hacerla en esta hacienda, debido a que la ubicación del lugar permitía involucrar a las poblaciones de tradiciones muiscas que viven en el municipio. Además, Carmen Millán discutió sobre la relevancia de tener en cuenta las lenguas nativas del país, ya que es una de las manifestaciones comunicativas y culturales que muestra el carácter multicultural, pluriétnico y multilingüístico propio del país. Para esta sesión se trabajaron temas tales como la reconstrucción de la identidad Tinigua y la relevancia de la lengua en este proceso y la lengua y cultura Muisca.
Para el 22 y 23 de febrero el evento se realizó en el Instituto Caro y Cuervo. De estas sesiones se destacan tres ejes de acción de las presentaciones realizadas:1) investigación y pedagogía de lenguas nativas; 2) arte, lenguas y cultura y; 3) cine, lengua y literatura. Cada una de estas propuestas fue desarrollada acorde a las experiencias y vivencias de los participantes. Entre los temas desarrollados encontramos mitología Tikuna, simbología de los Embera Chamí, relatos ancestrales Wayúu, tradición oral de los sanandresanos, tradición oral de las naciones originarias de Abya Yala y literaturas indígenas.
Para concluir, cabe resaltar que cada uno de estos intercambios de conocimiento entre los ponentes y los asistentes fue destacable, pues no hubo barreras de interacción, más bien hubo dinámicas basadas en la discusión, participación y trabajo colectivo para adentrarse en los temas culturales y lingüísticos abordados.