Está en sus voces la leyenda de una partera en la frontera. Unas adolescentes que se aferran a la fe en un internado de monjas. Otra de un mecánico ecuatoriano bastante amoroso o del baile de tres hermanas que hicieron un pacto eterno en medio del carnaval indígena. No es casualidad que en este grito narrativo del alto y bajo Putumayo los perfiles se inclinen por un contexto más apegado a lo social, humano: de mujeres empeñosas y personajes corajudos que, sin dudarlo demasiado, engrandecen la historia de esta frontera, muchas veces olvidada y casi invisible para el interior.
“Regresamos acá, porque nos prometimos, cuando partieron los mayores, estar en las buenas y en las malas las tres hermanas hasta la muerte”. Hermanas Cuatindioy, carnaval de Santiago.
1-El internado: distintos rostros de una misma familia Jazmín Revelo y Felipe Ortega
2-Adela. Danny Guerrero
3-Crescencia Bastidas, memoria viva de un territorio. Miguel Lucero
4-El amor no sabe de fronteras. Arneth Perdomo
5-Las hermanas Cuatindoy. Jazmín Revelo y Felipe Ortega
6-Gobernando en pueblo ajeno Eyver Martínez
7-Retrato de una lucha familiar. Julián Bolaños